LA ECONOMÍA Y USTED…
Eliseo Castillo
TUS PASOS
“Mientras la obscuridad se establece, / noche como cualquiera, se diría, / tinieblas y susurros, se rumora, / la casi nula figura de tu cuerpo se adivina, / no es que faltes, no te ocultas, / es la noche que te niega, te reclama, / tus pasos al final te delatan, / tu aroma inunda mi alma”…elíseo
Las mentiras del supuesto éxito económico con el sector externo que se festeja en México, no pasa más allá de ser un mero “parche de relumbrón” que poco aporta para el crecimiento de la economía nacional.
Como los gobiernos anteriores, el actual de AMLO continúa con la tesis que no soporta la prueba del impacto social, del supuesto éxito del sector exportador. Es una mentira penosa, no hay tal.
Cuando los números hablan…, las frases hechas callan.
Cada que se festeja la celebración de un nuevo acuerdo comercial con algún país amigo, lo primero que se hace es promover la idea de que todo será mucho mejor que antes; así pasó desde 1994 cuando se inició el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLC), se ha repetido sistemáticamente la idea de que la apertura comercial indiscriminada ha sido una bendición para las economías nacionales; treinta años después, los resultados no avalan esta postura.
Lo dijimos entonces, desde 1993, que la apertura comercial indiscriminada se diseñaba para beneficiar a los de siempre; a las grandes empresas; que la idea de la globalización les entregó los mercados nacionales, y que los pequeños negocios terminaron por ser su alimento para seguir creciendo, hasta que se las comieron y las convirtieron en sus apéndices en diversos países.
Las trasnacionales fueron reclasificadas como empresas de élite, o empresas globales. Esto no es el éxito de las economías nacionales.
El primer semestre del actual 2024, en materia de comercio internacional sigue el rumbo que ha llevado por lo menos los últimos cincuenta años, por no regresar más el tiempo, de manera promedio, se ha comprado más que lo que se vende; y si el sentido común no falla, no existe persona, empresa o gobierno que resista vivir sistemáticamente gastando más que lo que tiene en su bolsillo.
Eso se llama deuda, compromiso que hay que pagar en algún momento; o ser embargado, demandado, incluso encarcelado.
Las cifras hunden al optimismo; no hay forma de afirmar que las cosas están bien en el sector externo, cuando…
“En la primera mitad del año México registró (en cifras preliminares) exportaciones por 299 mil millones de dólares (mdd) 2.6% más que en igual período de 2023, e importaciones por 304 mil millones, 2.2% más. Por diferencia, el déficit comercial fue de -5.5 mil mdd…. A este déficit también se llega sumando el déficit petrolero del semestre -4.3 mil m y el sorpresivo déficit no petrolero de -1.2 mil m.”
Fuente: Con datos del Banco de México; David Márquez Ayala; periódico La Jornada´, lunes 19 de agosto, 2024, pag.26
Este déficit no muy grande, se ha repetido en los últimos 50 años al menos; a veces más alto, otras no tanto; pero al final es una tendencia promedio.
¿Dónde está el éxito de la globalización; de la apertura comercial…?
Repetimos, si se gasta más que lo que se gana, en algún momento se tiene que pagar las consecuencias; nadie aguanta perder todo el tiempo sin tener que pagar.
El éxito que no lo es en realidad, sirve para que las grandes empresas se muevan a México para producir y vender en los Estados Unidos; sobre todo las armadoras de carros, camiones, electrónicos procedentes de China, Japón, Corea del Sur, Alemania, Francia, España, entre los principales.
Se sigue repitiendo la tesis de hace cuatro décadas cuando se promovió la idea de la apertura de los mercados para la globalización de la economía; el resultado se repite desde entonces: ganan los de siempre, pierden los demás.
Como en cualquier relación, la comercial es muy clara; gana el que logra vender más que lo que compra en el medio y largo plazo; de otra forma, el intercambio deja de tener la importancia estructural que se le quiere dar.
El comercio internacional se ha convertido en una actividad necesaria para el crecimiento y acumulación de las economías nacionales; pero los principales ganadores e interesados en esta política son las grandes empresas internacionales; hoy llamadas “globales”.
Así es como parte de la riqueza del mundo se la apropiaron las potencias como Estados Unidos en su momento, Japón, Alemania, Corea del Sur, y sin duda hoy, el gran ganador China.
México nunca ha sido ganador en su sector externo; ha sido dependiente de gastar más que lo que gana; compra más que lo que vende…
Dejemos de mentir y engañar; el gobierno necesita decir que todo va muy bien en materia de comercio internacional; la pregunta es…
¿para quien va tan bien?
Las cifras desnuda a cualquier gobierno, también al mexicano.
Le abrazo.
EL ARTÍCULO DE LA SEMANA…
LA ECONOMÍA Y USTED
Eliseo Castillo
SECTOR EXTERNO, QUE NO ES TAN BUENO
TUS PASOS
“Mientras la obscuridad se establece, / noche como cualquiera, se diría, / tinieblas y susurros, se rumora, / la casi nula figura de tu cuerpo se adivina, / no es que faltes, no te ocultas, / es la noche que te niega, te reclama, / tus pasos al final te delatan, / tu aroma inunda mi alma”…elíseo
Las mentiras del supuesto éxito económico con el sector externo que se festeja en México, no pasa más allá de ser un mero “parche de relumbrón” que poco aporta para el crecimiento de la economía nacional.
Como los gobiernos anteriores, el actual de AMLO continúa con la tesis que no soporta la prueba del impacto social, del supuesto éxito del sector exportador. Es una mentira penosa, no hay tal.
Cuando los números hablan…, las frases hechas callan.
Cada que se festeja la celebración de un nuevo acuerdo comercial con algún país amigo, lo primero que se hace es promover la idea de que todo será mucho mejor que antes; así pasó desde 1994 cuando se inició el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLC), se ha repetido sistemáticamente la idea de que la apertura comercial indiscriminada ha sido una bendición para las economías nacionales; treinta años después, los resultados no avalan esta postura.
Lo dijimos entonces, desde 1993, que la apertura comercial indiscriminada se diseñaba para beneficiar a los de siempre; a las grandes empresas; que la idea de la globalización les entregó los mercados nacionales, y que los pequeños negocios terminaron por ser su alimento para seguir creciendo, hasta que se las comieron y las convirtieron en sus apéndices en diversos países.
Las trasnacionales fueron reclasificadas como empresas de élite, o empresas globales. Esto no es el éxito de las economías nacionales.
El primer semestre del actual 2024, en materia de comercio internacional sigue el rumbo que ha llevado por lo menos los últimos cincuenta años, por no regresar más el tiempo, de manera promedio, se ha comprado más que lo que se vende; y si el sentido común no falla, no existe persona, empresa o gobierno que resista vivir sistemáticamente gastando más que lo que tiene en su bolsillo.
Eso se llama deuda, compromiso que hay que pagar en algún momento; o ser embargado, demandado, incluso encarcelado.
Las cifras hunden al optimismo; no hay forma de afirmar que las cosas están bien en el sector externo, cuando…
“En la primera mitad del año México registró (en cifras preliminares) exportaciones por 299 mil millones de dólares (mdd) 2.6% más que en igual período de 2023, e importaciones por 304 mil millones, 2.2% más. Por diferencia, el déficit comercial fue de -5.5 mil mdd…. A este déficit también se llega sumando el déficit petrolero del semestre -4.3 mil m y el sorpresivo déficit no petrolero de -1.2 mil m.”
Fuente: Con datos del Banco de México; David Márquez Ayala; periódico La Jornada´, lunes 19 de agosto, 2024, pag.26
Este déficit no muy grande, se ha repetido en los últimos 50 años al menos; a veces más alto, otras no tanto; pero al final es una tendencia promedio.
¿Dónde está el éxito de la globalización; de la apertura comercial…?
Repetimos, si se gasta más que lo que se gana, en algún momento se tiene que pagar las consecuencias; nadie aguanta perder todo el tiempo sin tener que pagar.
El éxito que no lo es en realidad, sirve para que las grandes empresas se muevan a México para producir y vender en los Estados Unidos; sobre todo las armadoras de carros, camiones, electrónicos procedentes de China, Japón, Corea del Sur, Alemania, Francia, España, entre los principales.
Se sigue repitiendo la tesis de hace cuatro décadas cuando se promovió la idea de la apertura de los mercados para la globalización de la economía; el resultado se repite desde entonces: ganan los de siempre, pierden los demás.
Como en cualquier relación, la comercial es muy clara; gana el que logra vender más que lo que compra en el medio y largo plazo; de otra forma, el intercambio deja de tener la importancia estructural que se le quiere dar.
El comercio internacional se ha convertido en una actividad necesaria para el crecimiento y acumulación de las economías nacionales; pero los principales ganadores e interesados en esta política son las grandes empresas internacionales; hoy llamadas “globales”.
Así es como parte de la riqueza del mundo se la apropiaron las potencias como Estados Unidos en su momento, Japón, Alemania, Corea del Sur, y sin duda hoy, el gran ganador China.
México nunca ha sido ganador en su sector externo; ha sido dependiente de gastar más que lo que gana; compra más que lo que vende…
Dejemos de mentir y engañar; el gobierno necesita decir que todo va muy bien en materia de comercio internacional; la pregunta es…
¿para quien va tan bien?
Las cifras desnuda a cualquier gobierno, también al mexicano.
Le abrazo.
https://elpregonerodezamora.com/
Eliseo Castillo
SECTOR EXTERNO, QUE NO ES TAN BUENO
TUS PASOS
“Mientras la obscuridad se establece, / noche como cualquiera, se diría, / tinieblas y susurros, se rumora, / la casi nula figura de tu cuerpo se adivina, / no es que faltes, no te ocultas, / es la noche que te niega, te reclama, / tus pasos al final te delatan, / tu aroma inunda mi alma”…elíseo
Las mentiras del supuesto éxito económico con el sector externo que se festeja en México, no pasa más allá de ser un mero “parche de relumbrón” que poco aporta para el crecimiento de la economía nacional.
Como los gobiernos anteriores, el actual de AMLO continúa con la tesis que no soporta la prueba del impacto social, del supuesto éxito del sector exportador. Es una mentira penosa, no hay tal.
Cuando los números hablan…, las frases hechas callan.
Cada que se festeja la celebración de un nuevo acuerdo comercial con algún país amigo, lo primero que se hace es promover la idea de que todo será mucho mejor que antes; así pasó desde 1994 cuando se inició el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLC), se ha repetido sistemáticamente la idea de que la apertura comercial indiscriminada ha sido una bendición para las economías nacionales; treinta años después, los resultados no avalan esta postura.
Lo dijimos entonces, desde 1993, que la apertura comercial indiscriminada se diseñaba para beneficiar a los de siempre; a las grandes empresas; que la idea de la globalización les entregó los mercados nacionales, y que los pequeños negocios terminaron por ser su alimento para seguir creciendo, hasta que se las comieron y las convirtieron en sus apéndices en diversos países.
Las trasnacionales fueron reclasificadas como empresas de élite, o empresas globales. Esto no es el éxito de las economías nacionales.
El primer semestre del actual 2024, en materia de comercio internacional sigue el rumbo que ha llevado por lo menos los últimos cincuenta años, por no regresar más el tiempo, de manera promedio, se ha comprado más que lo que se vende; y si el sentido común no falla, no existe persona, empresa o gobierno que resista vivir sistemáticamente gastando más que lo que tiene en su bolsillo.
Eso se llama deuda, compromiso que hay que pagar en algún momento; o ser embargado, demandado, incluso encarcelado.
Las cifras hunden al optimismo; no hay forma de afirmar que las cosas están bien en el sector externo, cuando…
“En la primera mitad del año México registró (en cifras preliminares) exportaciones por 299 mil millones de dólares (mdd) 2.6% más que en igual período de 2023, e importaciones por 304 mil millones, 2.2% más. Por diferencia, el déficit comercial fue de -5.5 mil mdd…. A este déficit también se llega sumando el déficit petrolero del semestre -4.3 mil m y el sorpresivo déficit no petrolero de -1.2 mil m.”
Fuente: Con datos del Banco de México; David Márquez Ayala; periódico La Jornada´, lunes 19 de agosto, 2024, pag.26
Este déficit no muy grande, se ha repetido en los últimos 50 años al menos; a veces más alto, otras no tanto; pero al final es una tendencia promedio.
¿Dónde está el éxito de la globalización; de la apertura comercial…?
Repetimos, si se gasta más que lo que se gana, en algún momento se tiene que pagar las consecuencias; nadie aguanta perder todo el tiempo sin tener que pagar.
El éxito que no lo es en realidad, sirve para que las grandes empresas se muevan a México para producir y vender en los Estados Unidos; sobre todo las armadoras de carros, camiones, electrónicos procedentes de China, Japón, Corea del Sur, Alemania, Francia, España, entre los principales.
Se sigue repitiendo la tesis de hace cuatro décadas cuando se promovió la idea de la apertura de los mercados para la globalización de la economía; el resultado se repite desde entonces: ganan los de siempre, pierden los demás.
Como en cualquier relación, la comercial es muy clara; gana el que logra vender más que lo que compra en el medio y largo plazo; de otra forma, el intercambio deja de tener la importancia estructural que se le quiere dar.
El comercio internacional se ha convertido en una actividad necesaria para el crecimiento y acumulación de las economías nacionales; pero los principales ganadores e interesados en esta política son las grandes empresas internacionales; hoy llamadas “globales”.
Así es como parte de la riqueza del mundo se la apropiaron las potencias como Estados Unidos en su momento, Japón, Alemania, Corea del Sur, y sin duda hoy, el gran ganador China.
México nunca ha sido ganador en su sector externo; ha sido dependiente de gastar más que lo que gana; compra más que lo que vende…
Dejemos de mentir y engañar; el gobierno necesita decir que todo va muy bien en materia de comercio internacional; la pregunta es…
¿para quien va tan bien?
Las cifras desnuda a cualquier gobierno, también al mexicano.
Le abrazo.