LA ECONOMÍA Y USTED…
Eliseo Castillo
NOMBRARTE AMIGA
“Con las pequeñas cosas que te nombran, / una prenda en el cajón, el sentir de tus pasos, / pareciera que desde el fondo del tiempo, / tus brazos se extendieran, agigantados, / todo te nombra, luego te espera, / amor de ayer, de hoy amiga; / caminarás a mi lado sin duda, el resto de mi vida”…elíseo
En su casi ciega lucha por bloquear la reforma al poder judicial mexicano, los ministros magistrados de la Suprema Corte de Justicia, han tenido la desfachatez y casi acción enfermiza de hacer sentir que ellos, son personas impolutas, e infinitamente superiores al resto de los mexicanos.
A sabiendas de que la constitución mandata que en México, ningún funcionario público puede ganar más que el presidente; en este caso, la presidenta, (reforma por cierto realizada en el sexenio de Calderón), han fingido, con su propuesta de presupuesto para el año 2025, en el que fingen que van a dejar de ganar las cantidades superiores que han recibido bajo amparo desde 2018; recordemos que junto con cientos de altos funcionarios se ampararon desde el momento en que el expresidente AMLO señaló que se debía respetar la ley y rebajarse sus salarios.
Sabemos que no lo hicieron, y burlándose de la ley y los mexicanos que con penosa realidad ganan apenas salarios de entre 5000 a 15 000 pesos mensuales; ellos se asignaron ingresos mensuales de entre 300 000 a 500 000 pesos mensuales.
Con un acto de hipocresía…
Como si de verdad la sociedad fuera una masa humana tonta y analfabeta, la ministra Norma Piña ha presentado un formato de presupuesto para el 2025, en el que afirma que se han reducido los ingresos exagerados de la élite de los impartidores de justicia.
Los argumentos que presenta es que se han reducido sus salarios en un buen porcentaje…
Por ejemplo, por mayoría de votos los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) aprobaron su proyecto de presupuesto para 2025, afirmando que incluye “reducción salarial de 330 altos funcionarios de ese alto tribunal, incluidos los 11 ministros”.
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Sin embargo la realidad es otra, pues de acuerdo a la ministra Lenia Batres, tal proyecto mantiene el salario de los trabajadores por encima del tope que marca la Constitución,…no se transparenta la totalidad de conceptos que integran; se suprime únicamente el pago de riesgos y se siguen incluyendo conceptos expresamente prohibidos por la ley; no hay medida de austeridad. Por el contrario, incrementan de manera desmedida e injustificada diversas partidas, como la de obras; no se menciona nada de los seis fideicomisos que tiene la SCJN (de 14 del Poder Judicial), de los que la reforma constitucional ordena extinguir y entregar sus saldos a la Tesorería de la Federación”,
Fuente: Carlos Fernández-Vega; periódico La Jornada, martes 29 de octubre, de 2024; página 20
Al final todo ha quedado desnudo en su codicia y cinismo; la propuesta de presupuesto les deja a cada ministro con un ingreso anual de 5 325 000 cinco millones, trescientos veinticinco mil pesos por año; mientras que la presidenta Claudia recibirá…: 2 764 000 dos millones, setecientos sesenta y cuatro mil pesos por año.
¿Se nota la diferencia…?
Proponen un ingreso de más del doble de lo que gana la presienta…
Siguen violando la constitución; los que juraron guardar y hacer guardar a la misma.
Ahora, con toda la hipocresía y oportunismo posible, anticipan su posible renuncia al cargo a cambio de llevarse una pensión millonaria; obviamente superior a lo que recibe la presidenta.
La pensión que buscan llevarse consiste en un salario base de 206 000 pesos mensuales, más todos los ingresos y derechos de que han disfrutado; al final, los niveles de ingresos que recibirían de por vida iría entre los 350 000 a los 450 000 posiblemente, dada la lista de beneficios del cargo.
Obvio, tienen miedo presentarse como candidatos para que los mexicanos electores decidan si los quiere impartiendo justicia…
¡Para eso se crearon las clases sociales…!
¡Ah, nacos envidiosos, gana salarios de hambre!
Bueno, imagino que eso han de decir del resto de los mexicanos; no lo se, lo imagino.
Le abrazo.