jue. May 2nd, 2024

* Aquel pequeño grupo de  iniciadores encabezados por el Sacerdote Salesiano Isauro Pedraza Ureña y los Caballeros de Don Bosco. * Ritos de Semana Santa, pareciera estaban hechas únicamente para rezanderas mujeres

Enrique COVARRUBIAS MAGAÑA

Sesenta y tres años han pasado ya desde aquella vaporosa mañana del 29 de marzo de 1959 en que un puñado de varones zamoranos salió a la calle a protestar en silencio el crimen de los siglos. Por más de 12 lustros o seis décadas si así lo queremos burilar en el paisaje zamorano, cientos de miles de zamoranos y de otras latitudes han marchado por el ardiente pavimento de sus calles movidos únicamente por una gran fe cimentada en el sacrificio de  Jesús el Cristo, aquel que recorriera la Vía Dolorosa hace casi dos siglos, rumbo al cerro de las Calaveras o del Gólgota, cargando el madero que le serviría de mortaja.

Han pasado los años y el primeramente llamado Desfile, luego Marcha y actualmente Procesión del Silencio, cada vez congrega más fieles y no fieles, desde aquellos 14 Caballeros de Don Bosco que a la vera del templo de Los Dolores iniciaran, con el inolvidable Sacerdote Salesiano, Isauro Pedraza Ureña, el recorrido con el único fin de participar en las celebraciones de Semana Santa que, pareciera estaban hechas únicamente para rezanderas mujeres.

“Previamente se habían tenido algunas reuniones con los Caballeros de Don Bosco, y con miembros del Movimiento Familiar Cristiano del rumbo; (rumbo que por esos años estaba satanizado por tener cerca la zona de tolerancias o roja –calle Independencia, entre A. Nervo y Guerrero-), fue así que se dieron los primeros pasos para organizar una marcha donde participaran los hombres, eso sí, en completo silencio y sólo respondiendo en las estaciones del viacrucis.

De acuerdo a testimoniales de zamoranos y refrendados por don José Luis Gálvez, único testigo de sus inicios y que participó (2017), se logró saber que inicialmente aquel Viernes Santo del año de 1959, participaron (algunos ya fallecidos) el grupo de fieles encabezados por el Sacerdote Salesiano Isauro Pedraza Ureña (fallecido en Uruapan en el año de 1999), que hicieron el recorrido por las banquetas del entorno del barrio de Los Dolores, la marcha transcurrió en el más completo silencio, fue la condición, además de no participar mujeres. Ahí estaban, miembros de la orden de los Caballeros de Don Bosco, como José “El chino” Jaimes Covarrubias; cargando la cruz, José Vivanco el de la botica de la Salud; José Garibay; Enrique Bueno “La pulga”; Rafael Alcázar; , Juan García Acevedo “El Tigre”; José Luis Gálvez; José López Del Río “El Cagao”; Pancho “El Ronco” Aviña; José Luis Castillo siendo un niño; Enrique Cáceres “el peluquero”; Pancho Tadeo, Ezequiel Arias ‘el carpintero’; El Sr. Lomelí, “La Nica”; Jesús Dueñas ‘El Sastre” Rodolfo y Nacho Acevedo; …entre otros más que escapan a la memoria….Ese puñado de hombres, no les importó el escarnio de los fariseos y escribas de la época, tampoco el flagelo de los ardientes rayos de sol que aplomo caían sobre sus testas…nada les detuvo…nadie los contuvo…pues su fe, superó cualquier sufrimiento. Por ello el sacrificio iniciado por aquellos varones ha perdurado por más de 63 años, durante los cuales han participado niños de la mano de sus padres…de sus abuelos…trasmitiendo así la tradición de generación en generación. Ahora esos niños, ya adultos emulan a sus antepasados dando a su vez la conseja a sus hijos…ello ha perdurado seis décadas y 3 años.

Miles han hecho el recorrido, zamoranos, nacionales y extranjeros, algunos descalzos otros cargando la cruz, unos más con la corona de espinas sobre sus cabezas; muchos han fallecido ya. En cada marcha, desde hace muchos años, el ya fallecido profesor Manuel Equihua, cronista del evento nombraba desde el camión de sonido a los que ya no estaban y exhortaba a pedir por los que ya no estarían para el siguiente año…las listas a través de los años han sido largas y sorpresivas al saber que ya no está el amigo, el compadre, el mismo vecino al que quizás en vida nunca se le dirigió la palabra y en su momento hasta se le injurió. Por lo que la Procesión del Silencio es y será la gran ocasión para el examen de contrición entre los fieles católicos y no católicos…

La Marcha del Silencio, llegó a su aniversario 60, el 19 de abril del año 2019, fecha en que se develó la placa conmemorativa de ese aniversario en el pórtico de la torre derecha del templo de los Dolores.

Solo la Pandemia declarada a inicios del 2019 y continuada con intensidad en 2020, hizo que el evento masivo, se suspendiera, aun así hubo el recorrido de las algunas imágenes por las calles de la ciudad se hizo, sin gente, durante dos años; la marcha se restableció el viernes santo del 2022, para ello se continuo con el número progresivo, hasta llegar a lo que será este próximo viernes 7 de abril de 2023 a su edición 64.

Para este Viernes Santo 7 de Abril de 2023, la Procesión del Silencio llegará a su edición LXIV, la cita será a las puertas de la Iglesia de Los Dolores de donde iniciará “oficialmente” a las 10:00 de la mañana. El recorrido será el siguiente: calle Ocampo, vuelta por Madero hasta la Medalla Milagrosa, donde se rezará la primera estación del Viacrucis; de ahí proseguirá por la calzada Zamora-Jacona para dar vuelta sobre la calle Martínez de Navarrete, cruza Morelos por la estatua del PREGONERO para seguir por la misma calle hasta la Glorieta de 5 de Mayo, ahí prosigue hacia el sur por la misma calle para dar vuela en Virrey de Almanza para llegar al templo del Rosario; el contingente seguirá por Niños Héroes para dar vuelta por Leonardo Castellanos, otra vez se rodea la Glorieta  y se sigue por la 5 de Mayo hacia el norte para llegar al Santuario Diocesano de Guadalupe. En ese lugar el Obispo dará un fervorín, para después seguir por la misma 5 de mayo, para hacer un alto en templo de San José, para rezar otra estación, se continuará hasta la avenida Juárez, cruzarán las calles Serdán, Hidalgo, ahí frente al templo del Calvario se hará un alto más para rezar dos estaciones. El Desfile del silencio continuará por la misma avenida Juárez hasta Pino Suárez Norte para llegar a López Rayón y hacer alto frente al templo del Carmen; se proseguirá por la misma López Rayón hasta la calle Plancarte donde se virará y se hará el alto frente a la Divina Providencia…a esas horas ya el calor es fuerte y en un acto de mayor sacrificio todos los participantes se hincan por unos minutos para rezar la estación que data la muerte del Jesús el Cristo…el marcha continúa por la avenida Juárez ya en retorno hacia la calle Madero donde se hace una penúltima parada frente a La Purísima; continúa por la misma Madero hacia la calle Ocampo y llegar al punto de partida frente a Los Dolores, donde luego de un breve fervorín el obispo Diocesano don Javier Navarro Rodríguez dará la bendición con el señor del Perdón…Cabe hacer notar que en las iglesias donde se rezaron las estaciones se instalaron cuadros representativos de la pasión…Si el tiempo de recorrido hace 63 años fue de aproximadamente de una hora,…a través de los años ha venido aumentando, el recorrido, el tiempo, y participantes…Para esta ocasión se estima un aproximado de 30 mil fieles los que acudan al porimeramente llamado Desfile, luego Marcha y actualmente Procesión del Silencio 2023 en un recorrido de aproximadamente 4 horas. (Esta corta reseña es parte del Ensayo “60 años del Desfile del Silencio”- De mi autoría, cuya publicación aparecerá en breve.)

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