Miles de turistas se dieron cita para recibir la primavera y observar el “descenso” de Kukulkán en la zona arqueológica de Chichén Itzá, sin embargo en esta ocasión no “pudo bajar”.
Este 20 de marzo fue el comienzo del equinoccio de primavera y miles de turistas llegan a Chichén Itzá para observar un fenómeno arqueo-astronómico que es visible en las pirámides dos veces al año.
Aunque en esta ocasión no fue visible lo que se conoce como el “ciclo de iluminación”, o “el descenso de Kukulkán”, ya que el sol proyecta una serie de triángulos de luz que crean la forma de una serpiente (emplumada, ya que se piensa que es Kukulkán) descendiendo por la pirámide
¿Por qué la serpiente emplumada no descendió esta primavera?
Pese a que mas de 10 mil 500 turistas se reunieron para observar el fenómeno, de acuerdo con el director de la zona arqueológica Chichén Itzá, Marco Antonio Santos Ramírez, no fue visible durante la llegada de la primavera.
Debido al frente frío número 41 que azotó costas del Golfo de México y Océano Pacífico, por lo que el cielo estuvo mayormente nublado en Yucatán durante gran parte del día.
Solamente se reportaron momentos en los que hubo la suficiente luz solar para observar la forma de la serpiente, aunque sin alcanzar su plenitud.
Sin Kukulkán pero turistas celebraron la primavera en Chichén Itzá
A pesar de que la serpiente emplumada no descendió para dar bienvenida a la primavera, turistas de distintas partes del mundo y de México acudieron al lugar para celebrar la llegada del equinoccio.
Se “recargaron de energía positiva” según las creencias, pero también escucharon las narraciones de los guías turísticos acerca de la civilización maya.